La adolescencia es un momento especialmente sensible en el desarrollo.
Es una etapa marcada por grandes cambios y grandes retos en que deben acomodarse nuevas formas de relación tanto del adolescente en sí mismo, como con los padres y el entorno, ahora visto de una forma muy diferente a cómo se durante la etapa de la niñez.
Iniciarse en el funcionamiento de la vida adulta necesariamente comporta dificultades.
Cuando cuesta sostener los problemas del día a día o éstos limitan la cotidianidad, pedir ayuda especializada puede permitir salir adelante.

< Terapia Familiar con infancia
"Los padres necesitamos que nos necesiten; los hijos adolescentes necesitan no necesitarnos".
El conflicto es real: lo sufrimos a diario conforme ayudamos a quienes amamos a independizarse de nosotros”.
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Haim G. Ginott